En 1847, Auguste Rousseau de Carpentras (en Vaucluse) plantó 7 hectáreas de robles (nuevamente de bellotas encontradas en el suelo alrededor de robles productores de trufas), y posteriormente obtuvo grandes cosechas de trufas. 100 y 200 cc de sustrato por cada punto de inoculación, cuantos más puntos de inoculación realicemos mayores probabilidades de éxito tendremos.2.- Extendemos de forma homogéneo el sustrato en el suelo en la zona de influencia de las raíces (100-200 cc por metro cuadrado) y posteriormente bien manualmente o con apero mecánico realizamos un trabajo del suelo con la finalidad de mezclarlo hasta una profundidad de 15-30 cm. Además de confiar en tu olfato, también puedes observar los signos en la superficie del suelo para buscar trufas silvestres sin perro. En palabras llanas, la trufa es la punta de la nariz del perro. Pues mientras nosotros permanecíamos allá, realizando muchas empresas belicosas, él se estaba tranquilo en lo más hondo de Argos, tierra criadora de corceles, y ponía gran empeño en seducir con sus palabras á la esposa de Agamenón.
¿Cómo murió el poderosísimo Agamenón Atrida? Siete años reinó éste en Micenas, rica en oro, y tuvo sojuzgado al pueblo, con posterioridad á la muerte del Atrida. Veníamos, pues, de Troya el Atrida y yo, navegando juntos y en buena amistad; pero, así que arribamos al sacro promontorio de Sunio, cerca de Atenas, Febo Apolo mató con sus suaves flechas al piloto de Menelao, á Frontis Onetórida, que entonces tenía en las manos el timón del barco y á todos vencía en el arte de gobernar una embarcación cuando arreciaban las tempestades. 395 Hechas las libaciones y habiendo bebido todos cuanto les plugo, fueron á recogerse á sus respectivas casas; pero Néstor, el caballero gerenio, hizo que Telémaco, el caro hijo del divinal Ulises, se acostase allí, en torneado lecho, debajo del sonoro pórtico, y que á su lado durmiese el belicoso Pisístrato, caudillo de los hombres, que era en el palacio el único hijo que se conservaba mozo. 346 «Júpiter y los otros dioses inmortales nos libren de que vosotros os vayáis de mi lado para volver á la velera nave, como si os fuerais de junto á un varón que carece de ropa, del lado de un pobre, en cuya casa no hay mantos ni gran cantidad de colchas para que él y sus huéspedes puedan dormir blandamente.
Ya la vuelta de aquél no puede realizarse; pues los inmortales deben de haberle enviado la muerte y el negro destino. ¿Fué quizás el no encontrarse Menelao en Argos, la de Acaya, pues andaría peregrino entre otras gentes, la causa de que Egisto cobrara espíritu y matase á aquel héroe? ¿Dónde estaba Menelao? ¿Qué género de muerte fué la que urdió el doloso Egisto, para que pereciera un varón que tanto le aventajaba? Si el rubio Menelao Atrida, al volver de Troya, hallara en el palacio á Egisto, vivo aún, ni tan sólo hubiesen cubierto de tierra el cadáver de éste: arrojado á la llanura, lejos de la ciudad, lo despedazaran los perros y las aves de rapiña, sin que le llorase ninguna de las aqueas, porque había cometido una maldad muy grande. Pues me glorío de ser entre ellos el más anciano; que todos los hombres que vienen con nosotros por amistad son jóvenes y tienen los mismos años que el magnánimo Telémaco. Al ser cosechada, el 70% de la trufa es agua y a partir de ese momento, no pueden pasar más de siete días sin estar en la mesa del consumidor. Es muy propio del carácter francés el entusiasmarse, apasionarse o encolerizarse por el meteoro del momento, por Brumale Fresco las cosas de actualidad.
Su carácter ha sido siempre una mezcla de filosofía y de desórdenes de la imaginación. Su aroma es intenso, una mezcla de gas metano y ajo. Los componentes volátiles responsables del aroma natural de las trufas son liberados por los micelios o cuerpos fructíferos, o derivan de microbios asociados a la trufa. El contenido restante son sales y otras sustancias que excretan las glándulas. Simona y sus dos hermanos, Manuel y Silvia, son el reflejo de una generación que se fue y volvió. Pero yo te exhorto é incito á que endereces tus pasos hacia Menelao; el cual poco ha que volvió de gentes de donde no esperara tornar quien se viera, desviado por las tempestades, en un piélago tal y tan extenso que ni las aves llegarían del mismo en todo un año, pues es dilatadísimo y horrendo. Entonces el dios dispersó las naves y á algunas las llevó hacia Creta donde habitaban los cidones, junto á las corrientes del Yárdano. Se dice que tiene su oríjen en el lago Chapo, alimentado por várias corrientes que bajan del Calbuco, i que aumenta su caudal con las aguas del rio Chico que se vacia en él.